Hemeroteca del 4 diciembre, 2019

Insistimos: No se han hecho los deberes antes de la cumbre y las Administraciones españolas no están coordinadas para afrontar el problema ni tienen plan serio implementable.

La constatación de la evolución A PEOR en la década negra de la crisis climática, con:

  • Empeoramiento de las causas que lo provocan desde que se tienen registros,
  • El aumento del nivel del mar, desde 1993,
  • El derretimiento de las capas de hielo de la Antártida y Groenlandia,
  • La acidificación del agua en un 26%,
  • El estrés térmico,
  • Las muertes y lesiones causadas por los desastres naturales y fenómenos meteorológicos;

fueron las principales ALERTAS que presentaron los expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Organización Meteorológica Mundial (OMM) durante la segunda jornada de la Cumbre del Clima de Chile / Madrid 2019.

La reducción de las emisiones y una batería de medidas del informe “Ocean for climate”, realizado por Because the Ojean presentado ayer en el Museo Thyssen-Bormemisza, dirigido principalmente a los países firmantes del Acuerdo de París, es una constatación de que no se está tejiendo acción coordinada de los gobiernos, países y organismos internacionales especializados como la OMS y OMM y de la propia ONU, como organización convocante y organizadora de la Cumbre del Clima, lo que convierte a cumbre en una sucesión de discursos, presentación de datos y alertas de que estamos muy mal pero no se hace nada o casi nada para revertir la situación y tendencia actual.

Apelamos pues a que para la cumbre de Glasgow del año que viene en el Reino Unido los países firmantes del Acuerdo de París y la propia ONU lleven los deberes de control, persuasión, sanción y aplicación de medidas urgentes que se proponen y/o sean implementables para revertir la tendencia de la última década.

En esa línea, apelamos a que la Unión Europea, el Gobierno de España, las Comunidades Autónomas y las Corporaciones Locales se organicen y pongan en marcha acciones concretas en sus ámbitos competenciales para combatir las causas del cambio climático en sus respectivos ámbitos, en los que el desgobierno y descoordinación y inactividad es prácticamente total y, como mucho, de meramente administrativa, sin efectos objetivos sobre las causas.

Desde la Asociación Castaño y Nogal pedimos e insistimos en la necesidad de un Plan con objetivos cumplibles, coordinación entre Administraciones, seguimiento y responsabilidad para los gestores públicos, parlamentos y medios de comunicación y universidades.

Siéntense, escúchense, planifiquen y póngase a trabajar para comenzar una nueva década de acción. Les ofrecemos la modesta sede de Castaño y Nogal en Quintá de Cancelada y, de camino, conocen lo que hemos hecho en los últimos diez años, con trabajo in situ, sin recursos y sin discursos.

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