Hemeroteca del mes abril 2025

El 26 de abril de 2025, mientras en Roma se rendía en tributo al Papa Francisco —padre de la encíclica Laudato Si’ sobre el cuidado de la casa común—, en Os Ancares la primavera ofrecía su propio homenaje: una sinfonía de vida y belleza que recorrimos con alma y los cincos sentidos abiertos.

Dos de los tramos de la Ruta Quintá – Río Donsal (II y III) nos regalaron un espectáculo que solo el corazón puede entender del todo: alfombras verdes tapizadas de flores blancas, amarillas y violetas, muros de piedra cubiertos de musgo luminoso, árboles centenarios abrazados por líquenes y enredaderas, agua que canta en cascadas mínimas y riega los sueños del bosque de sus aledaños.

La senda, esculpida en suaves curvas, invitaba a caminar despacio, a respirar hondo, a detenerse en cada brote de vida nueva. Xestas de oro encendido, tojos en flor, helechos y plantas medicinales dibujaban un paisaje casi irreal, donde el musgo oxigena los pulmones y la hierba y flores amortiguaba las pisadas como una bendición vegetal.

El río Donsal, en su caudal medio, marcaba el ritmo de esta jornada luminosa. Cada salto de agua, cada remanso transparente, componía una música natural que acompañaba los pasos y el latido del senderista en su recorrido 283. Entre los árboles, las ramas aún desnudas de algunas especies se enredaban con brotes verdes que anticipan la plenitud.

Hoy, más que nunca, sentimos que CyN ha esculpido con su labor medioambiental no solo una senda, sino un legado de belleza viva: aire limpio, agua clara, biodiversidad renacida. Cada detalle que vimos, cada foto tomada, es testimonio y premio a más de quince años de esfuerzo silencioso pero fecundo.

Recorrer esta ruta en primavera es una experiencia para el cuerpo y un alimento para el alma. Es respirar esperanza. Es abrazar la vida de las especies naturales y silvestres en su estado más puro y recordar que cuidar este rincón es cuidar también nuestra propia humanidad, la belleza y la armonía del paisaje y de los cinco sentidos.

A quienes nos siguen desde Galicia, España, América, Europa y Asia: observarán que esta belleza que hoy os compartimos también es vuestra. Venid a caminarla. Venid a sentir que, aquí, la vida aún canta. Venir con tiempo, sin prisa para leer la partitura natural y musical de una senda húmeda y con palio forestal sin parangón.

Comentarios Comentarios desactivados en Ruta Quintá-Río Donsal en Estado Puro: Una Alfombra Viva para los Sentidos

En lo más íntimo de Os Ancares, cuando la primavera asoma entre nubes y cantares, la Ruta Quintá – Río Donsal se transforma en un poema vivo, escrito en pétalos, musgos y aguas cristalinas. Este domingo, la senda se presentó como un retablo de estampas naturales, de esas que el alma reconoce como propias aunque nunca antes haya caminado por allí.

Los viejos caminos de piedra, cubiertos de alfombras de musgo esmeralda, conectan pasado y presente. Las pasarelas de madera, restauradas con mimo, guían al senderista entre laderas floridas, donde xestas (de flor amarilla y blanca), uces (de tonos granate), violetas silvestres y helechos nacientes convierten los márgenes en jardines espontáneos.

En el interior del bosque, el agua canta su idioma sobre piedras tapizadas de vida y rescoldos de historias milenarias e. El Donsal corre límpido, a veces tímido, a veces impetuoso, abrazado por bidueiros, ameneiros y robles centenarios que visten sus troncos de líquenes y barbas de musgo, que son centinelas y guardianes de un río humilde y poético. Todo aquí habla de pureza: el aire se respira con hondura, el silencio es antiguo y el canto de los pájaros —pinzones, carboneros, mirlos— es más nítido que cualquier palabra humana.

Y entre este verdor, sorprenden los cerezos silvestres en flor, esculpidos por el azar y las aves, como joyas blancas o rosadas engarzadas en la espesura autóctona. Son símbolos de resistencia y renacimiento, creciendo donde nadie los sembró, pero todos los celebran.

También las rocas, troncos huecos de árboles centenarios y milenarios y muros de antiguas construcciones en los vértices del río Donsal están cubiertos de musgo, como si la naturaleza reclamase lo que una vez fue suyo, sin destruirlo, solo abrazándolo, como lo hicieron senderistas del Grupo ONCE. En esta fusión entre lo humano y lo forestal y vegetal, se intuye el legado de quienes habitaron y cuidaron estas tierras antes de nosotros.

La senda está perfectamente transitable y señalizada, fruto del esfuerzo constante de la Asociación Castaño y Nogal e instituciones co-implicadas como el Concello de Becerreá y de Navia de Suarna. Caminarla es un homenaje silencioso a quienes creen que lo común merece ser protegido.

Esta Semana Santa 2025, mientras otros buscan bullicio, ruido, playa, calles y plazas saturadas de turistas, tú puedes optar por escuchar el alma de un valle, dejarte mojar por su frescura y reconectar con lo esencial. No es solo senderismo. Es introspección. Es belleza sin artificios. Es patrimonio natural, humano y emocional.

Ven. Camina. Siente. Y deja que la primavera del Donsal te habite, como lo hicieron esta maña senderistas de A Mariña Lucense.

Comentarios Comentarios desactivados en ESTAMPAS VIVAS DE UN SENDERO CON ALMA ANCESTRAL

Un abrigo blanco y verde que cubre castaños, robles, frutales y el alma de la montaña

En estos días de primavera, cuando la naturaleza despierta con fuerza renovada, las laderas, valles y fragas de la cuenca del Donsal, en pleno corazón de Os Ancares Lucenses, lucen un manto singular: un espeso recubrimiento de líquenes blanquecinos y musgos verdes que se adhieren con delicadeza a las cortezas de árboles nobles como castaños, robles y frutales de variedades antiguas.

Las imágenes que acompañan esta publicación lo dicen todo. Parece nieve… pero no lo es. Es vida microscópica y simbiótica que se adhiere allí donde el aire es limpio, donde la humedad es constante y donde el equilibrio entre vegetación, agua y altitud permite que florezcan estas especies silenciosas.

¿Qué es un liquen?

Los líquenes son organismos simbióticos formados por la unión de un hongo y un alga o cianobacteria. El hongo proporciona estructura y retención de agua; el alga, fotosíntesis. Esta colaboración les permite colonizar lugares extremos, pero solo prosperan donde el aire está libre de contaminantes, razón por la cual su presencia es un indicador mundialmente aceptado de buena calidad del aire y del oxígeno.

Los musgos, por su parte, son pequeños vegetales sin raíces verdaderas que tapizan muros, rocas y árboles de las zonas sombrías de la Ruta, creando un tapiz esponjoso y vibrante que retiene humedad y acoge microfauna. Ambos, liquen y musgo, conviven en perfecta armonía con la flora autóctona y aportan biodiversidad, color y oxígeno.

Termómetros del cambio climático

Investigaciones científicas y tesis universitarias en botánica ambiental han demostrado que la desaparición de líquenes y musgos es señal de alarma ecológica, ya que son altamente sensibles a contaminantes atmosféricos como el dióxido de azufre o los óxidos de nitrógeno. Por ello, su abundancia en Os Ancares no es solo una belleza paisajística, sino también un indicio científico de que aquí el aire aún se puede respirar sin filtros ni advertencias.

Las condiciones que favorecen su presencia —altas tasas de humedad, escasa contaminación, temperaturas suaves y alternancia de nieblas y sol— son las que predominan en los cinco tramos de la Ruta Quintá – Río Donsal (PR-G 159).

Un paisaje con alma

Caminar por este sendero es adentrarse en un ecosistema en equilibrio, donde el verde del musgo, el blanco ceniza del liquen y el violeta de los brezales en flor tejen un paisaje de otra época. Un senderista atento verá cómo las ramas desnudas de árboles centenarios parecen envueltas en escarcha vegetal, y cómo cada paso entre los regatos y fragas es también una inhalación de oxígeno puro.

En este mes, además, las flores silvestres, las plantas medicinales de los márgenes y los frutales en floración completan un mosaico natural extraordinario. Aquí se fusionan ciencia, belleza, salud y sostenibilidad.

Invitación a la experiencia

Invitamos a naturalistas, senderistas, educadores, fotógrafos y amantes del medioambiente a recorrer uno o varios tramos de la Ruta Quintá – Río Donsal, a observar con calma estos bioindicadores del bienestar ecológico y a dejarse envolver por el silencio vivo del paisaje, donde cada árbol cuenta una historia escrita en musgo y liquen.

Más información sobre la Ruta y el entorno:

Presentación general de CyN
Quintá de Cancelada – Corazón de la Ruta

Imágenes tomadas esta primavera por CyN: un paisaje modelado por el tiempo y por quienes lo cuidan.

#Liquen #Musgo #Biodiversidad #CambioClimático #Senderismo #RutaDonsal #PRG159 #CalidadDelAire

Comentarios Comentarios desactivados en EL LIQUEN BLANQUEA LOS BOSQUES DE OS ANCARES: TERMÓMETRO NATURAL DE LA PUREZA AMBIENTAL EN LA RUTA QUINTÁ – RÍO DONSAL