España entra en el otoño de 2025 con más de 350.000 hectáreas calcinadas, según datos consolidados de MITECO y Copernicus / EFFIS. Galicia, que representa menos del 6 % del territorio nacional, concentra sin embargo casi la mitad (cerca del 50%) de la superficie quemada, con una horquilla entre 170.000 y 210.000 hectáreas, conforme a las estimaciones satelitales y los balances autonómicos más recientes.

Solo en agosto ardieron unas 120.000 ha, y 37.800 ha pertenecían a la Red Natura 2000, el mayor daño ecológico de su historia. Esta divergencia entre cifras oficiales y satelitales evidencia una falta de transparencia estructural y obliga a una auditoría independiente sobre la gestión forestal y preventiva en Galicia.

El TAC del territorio revela la anatomía del fracaso: laderas desnudas, raíces al aire, mosaicos agrarios y forestales arrasados, falta de fajas cortafuegos o meramente simbólicas y discontinuas, planes locales caducados y brigadas reducidas a empleo estacional y/o de retén.

La Ley 3/2007 de prevención de incendios forestales y el DOG de 9 de enero de 2025 obligan a mantener 50 m de franja de gestión de biomasa alrededor de los núcleos rurales, crear redes secundarias municipales y aprobar planes anuales de prevención. Nada de eso se cumple ni se coordina con los ayuntamientos ni con las comunidades de montes.

A mayores, El PLADIGA 2025 de la Consellería de Medio Rural mantiene apariencia de planificación, pero carece de ejecución material, calendario operativo, evaluación y control público. Los recursos se consumen en extinción, no en prevención; los resultados lo certifican: Galicia arde por sistema, sin plan forestal y de prevención de efectivos.

El daño va más allá del bosque: es violación del mandato constitucional, ambiental y moral. El artículo 45 de la Constitución impone el deber de conservar el medio ambiente como garantía de la calidad de vida.

Su incumplimiento reiterado vulnera también las Directivas 92/43/CEE y 2009/147/CE, el Reglamento (UE) 2021/1119 sobre neutralidad climática y la Estrategia Europea de Biodiversidad 2030.

La incomunicación, inacción y descoordinación entre Xunta, MITECO y concellos supone una insumisión institucional frente a la legalidad ambiental europea y a la Carta de Derechos Fundamentales (arts. 37 y 41). El silencio político ante el fuego se convierte en complicidad por omisión.

Diagnóstico

• Galicia sufre una patología crónica de abandono preventivo.
• Las leyes se dictan, pero no se aplican; los presupuestos se aprueban, pero no llegan al monte.
• El suelo se encinera, el agua se contamina, el carbono regresa a la atmósfera y el paisaje pierde memoria, raices y color.
• Los musgos, líquenes, castaños y robles —testigos del tiempo— son los verdaderos denunciantes.
• Lo que arde no es solo biomasa: es biodiversidad, patrimonio y dignidad pública.

Tratamiento y cirugía preventiva

1. Auditoría ecológica, técnica y financiera independiente, con participación universitaria, municipal y ciudadana.
2. Brigadas permanentes todo el año, con planificación territorial, formación professional, medios propios y control de eficiencia.
3. Red de fajas silvícolas funcionales, diseñadas con criterios científicos y paisajísticos, no burocráticos.
4. Rendición de cuentas pública, conforme a los arts. 9.3 y 31.2 de la Constitución y al Reglamento Financiero de la UE.
5. Tipificación del ecocidio en el Código Penal español, por destrucción sistemática del medio natural mediante omisión institucional.

Pronóstico

• Sin cirugía preventiva inmediata, Galicia repetirá cada verano el mismo diagnóstico: fuego, erosión, despoblación, silencio, daños, ambientales, patrimoniales, culturales y humanos.

• Cada hectárea calcinada es una hemorragia ambiental que el clima agrava y la política niega.

CyN denuncia, una vez más, la violación de la Constitución, del derecho europeo y del deber moral de proteger la vida, reafirmando su compromiso con la verdad, la prevención y la justicia ambiental ante la Fiscalía de Medio Ambiente, la Comisión Europea y las Naciones Unidas. Porque lo que el fuego destruye no son solo montes: es el contrato social con la naturaleza y con el oxígeno que respiramos.

Fuentes de verificación: Copernicus / EFFIS (oct. 2025) · MITECO – EGIF (Informe 2025) · DOG 09 / 01 / 25 · Ley 3 / 2007 de Galicia · Constitución Española (arts. 9.3, 31.2 y 45) · Directivas 92 / 43 CEE y 2009 / 147 CE · Reglamento (UE) 2021 / 1119 · Consello de Contas (2023) y archivos de CyN.

Comentarios Comentarios desactivados en TAC MEDIOAMBIENTAL DE LOS INCENDIOS EN GALICIA 2025: Diagnóstico, cirugía preventiva y responsabilidad pública

Verín, Monterrei, Cualedro, Chandrexa de Queixa y otros municipios de Ourense: acta visual del fracaso medioambiental

No ardió solo el bosque. Ardió el territorio. Matorrales, viñedos, huertas, eriales, setos y laderas enteras se convirtieron en combustible. El sur de Ourense —Verín, Monterrei, Cualedro, Chandrexa de Queixa y otros municipios— vivió el agosto más devastador de los últimos años.

Donde antes había robles, castaños, ríos claros y aves, hoy hay ceniza, silencio y ausencia. Las imágenes tomadas por CyN la penúltima semana de septiembre son un acta visual del fracaso ambiental: fortalezas chamuscadas, viñas ennegrecidas, ríos turbios, montes sin horizonte. En pocas horas, el verde se volvió gris.

Los vecinos cuentan temperaturas nunca vistas. Vieron cómo el fuego saltaba de valle en valle, arrastrado por las ‘muxicas’, esas chispas incandescentes que el viento lanza como metralla. La naturaleza ardió sin defensa: sin fajas cortafuegos, sin coordinación, sin reacción.

Las brigadas forestales contratadas como “retenes” en invierno y primavera permanecieron inactivas. Los 19 distritos forestales de la Xunta siguen sin plan de prevención permanente. Los concellos, sin medios. Y Galicia arde —cada verano— porque la prevención se finge y la planificación se posterga.

Francia exige cortafuegos de 100 metros. España, de 50. Galicia apenas llega a 30, cuando existen. No es una fatalidad climática: es una responsabilidad política, técnica y moral. No hay plan integrado de prevención ni una estrategia de especies coherente con el clima que cambia. Cada monte abandonado es una bomba latente.

Las lluvias del otoño apagaron las brasas, pero no el problema. El fuego volverá. Volverá en 2026 y en los años siguientes si todo sigue igual: sin cortafuegos, sin limpieza, sin cultura forestal, sin verdad institucional. La ceniza se disuelve, pero la herida permanece. Miles de hectáreas calcinadas, biodiversidad perdida, aire envenenado, agua contaminada, patrimonio dañado. Y ninguna diligencia abierta en la Fiscalía de Medio Ambiente.

CyN denuncia una vez más la inacción estructural y la pasividad de las instituciones. Lo que arde no es solo el monte: arde la verdad, arde la responsabilidad pública, arde la esperanza de futuro en Galicia. Cada incendio devora siglos de paisaje, cultura, agua y oxígeno. Y eso —como el alma del territorio— no se reforesta.

La lluvia no lava la culpa ni borra la huella del fuego. Solo la conciencia, la justicia y la acción constante podrán evitar que el próximo verano vuelva a ser el mismo infierno.

Comentarios Comentarios desactivados en Galicia tras el fuego: la huella incendiaria de un agosto que devoró el otoño

En este inicio de otoño de 2025, la Ruta del Donsal nos ofrece un espectáculo que trasciende la belleza paisajística: es el reflejo de dieciséis años de compromiso colectivo con la conservación ambiental. Gracias al esfuerzo sostenido de múltiples manos, la gestión responsable del territorio, la investigación y la divulgación constante, el Sendero Quintá–Río Donsal alcanza hoy un estado de plenitud que inspira respeto y admiración.

El bosque, renovado tras la última tormenta, revela su autenticidad más profunda: las hojas de roble y castaño alfombran los caminos; los muros de piedra y los paneles informativos testimonian la dedicación y el esfuerzo de quienes han trabajado por este espacio con recursos limitados; y la diversidad cromática del paisaje constituye un ejemplo de naturaleza en su máximo esplendor. El aire fresco que recorre la senda simboliza la resiliencia de un entorno que se mantiene gracias al respeto y cuidado de sus custodios.

Cada paso en el Sendero Quintá–Río Donsal representa memoria, presente y futuro. Proteger este recorrido implica salvaguardar la dignidad de la naturaleza, honrar la herencia de quienes lo levantaron con esfuerzo y compromiso, y garantizar que las generaciones venideras puedan disfrutar de este legado. El Donsal no es solo un sendero: es un símbolo de la alianza entre la humanidad y la tierra, una demostración de ética y belleza frente a los obstáculos que alguna vez amenazaron su preservación.

Poema Final (Institucionalizado)

El arco iris,
puente de luz sobre el valle,
testigo de dieciséis años de entrega y cuidado.
Cada gota refleja compromiso,
cada hoja representa una promesa.

El bosque nos recuerda:
respetemos su integridad,
conservemos su legado.

Si tras la tormenta aún surge el arco iris,
es señal de que la naturaleza confía
en nuestra responsabilidad y fidelidad.

Comentarios Comentarios desactivados en Un Puente Multicolor del Arco Iris Celebra 16 Años de Custodia Ambiental en la Ruta del Donsal

Crónica vivencial en la Ruta Quintá-Río Donsal tras la sequía, el fuego y el abandon

 

1. El regreso del agua

Después de más de dos meses sin una sola gota, la lluvia volvió a caer torrencialmente sobre Quintá de Cancelada y la Ruta PR-G 159. Fue como un milagro largamente esperado: agua bendita sobre una tierra reseca y herida. El olor a tierra mojada llenó el aire, los troncos oscuros comenzaron a brillar, y los musgos y líquenes, apagados por la sed, recobraron su verde intenso. En pocos minutos, la fraga atlántica se transformó en un santuario de humedad y vida, devolviéndonos un espectáculo que parecía perdido bajo el sol tórrido del verano.

2. El recuerdo del fuego

Pero el bosque no olvida. El verano dejó cicatrices: más de 410.000 hectáreas ardieron en España y más de 130.000 en Galicia. Casas, frutales, prados y árboles nobles quedaron reducidos a cenizas. Cinco vidas humanas se perdieron y muchas otras quedaron marcadas para siempre. Caminando por entornos quemados e incluso en la senda aún se perciben esas huellas: hojas secas prematuras en ramas verdes, insectos que desaparecieron con el calor, arbustos ennegrecidos en los márgenes. El silencio que cubre zonas quemadas y adyacentes no es paz, sino duelo.

3. El bosque autóctono resiste

Y sin embargo, la vida resiste. Nogales cargados de fruto, castaños centenarios y robles robustos siguen alzándose como guardianes del territorio. Con las primeras lluvias, el río Donsal recuperó su canto, deslizándose entre rocas cubiertas de musgo y helechos renacidos. Cada paso por la senda recuerda que la biodiversidad gallega aún tiene fuerza y capacidad de resiliencia, siempre que se la respete y proteja como en la Cuenca del río Donsal.

4. Lo que falta

El agua devuelve vida, pero no basta. El monte necesita prevención integral, planificación forestal seria, cortafuegos reales bien mantenidos y leyes cumplidas. La ausencia de estas medidas convierte cada ola de calor en una sentencia anunciada. La Ruta Quintá-Río Donsal, candidata a Sendero Azul 2026, no es solo un camino homologado: es símbolo de lo que debe cuidarse con rigor y compromiso, porque representa bosque autóctono, agua limpia, patrimonio natural y memoria colectiva.

5. Llamado al futuro

Esta crónica es a la vez un testimonio y una advertencia. El agua que hoy renace en la fraga debe convertirse en compromiso político y social: que Galicia y España dejen de contar cada verano por hectáreas arrasadas, y comiencen a medirlo en bosques vivos, paisajes protegidos y comunidades rurales seguras. La lluvia nos ha recordado que aún hay esperanza. Ahora hace falta voluntad para que esa esperanza se convierta en futuro.

Al margen del cambio climático, que es real y todos lo sabíamos, la conclusión es clara: los verdaderos responsables de tanta superficie arrasada no son incendiarios anónimos, sino cargos, técnicos y administraciones que, día sí y día también, incumplen el deber legal de prevención integral. Y ahora, los más de 8.000 millones de euros en extinción, pérdidas y daños los pagaremos todos los contribuyentes, pero sobre todo quienes lo han perdido todo: los que se quedaron sin casa, sin pastos, sin vida (fallecidos) y, en realidad, todos nosotros, privados de lo más valioso: un bosque vivo, productor de oxígeno y de futuro.

 

Comentarios Comentarios desactivados en CUANDO LA LLUVIA DEVUELVE LA VOZ AL BOSQUE

La investigación de CyN y los datos ya publicados permiten identificar causas estructurales que han favorecido la magnitud de los incendios y de la superficie arrasada en Galicia y Castilla y León.

Uno de los factores clave es la reducción normativa del ancho de los cortafuegos. En Galicia, la Ley 3/2007, de prevención y defensa contra los incendios forestales, modificada por la Ley 7/2012, de montes de Galicia y por disposiciones posteriores de la Xunta de Galicia, dejó anchos mínimos por debajo de referencias habituales en países de nuestro entorno.

Francia: ≈ 100 m (referencia sectorial)
España, referencia habitual: ≈ 50 m
Galicia: 30 m en varios supuestos tras la flexibilización autonómica
Castilla y León: 10 m en pistas forestales y 30 m en líneas de defensa (Decreto 63/2017)

Estas rebajas se apartan de las recomendaciones de la Unión Europea (COM(2010)66 final) y de la ONU —FAO y UNDRR— (FAO Forestry Paper 166, UNDRR), que insisten en barreras amplias, continuas y bien mantenidas como parte de una gestión integrada del combustible.

Es imprescindible que quienes aprobaron o convalidaron estas reducciones expliquen su motivación y que se revisen con urgencia conforme a estándares europeos e internacionales. Se formula denuncia expresa ante la UE y la ONU por tolerar una rebaja de exigencias preventivas pese a las advertencias técnicas y científicas.

Comentarios Comentarios desactivados en Cortafuegos. Flexibilización ancho e incumplimiento normas internacionales.

España arde. Galicia, Castilla y León y Extremadura concentran el 85,3% de las hectáreas calcinadas entre el 3 y el 18 de agosto de 2025, según datos del sistema europeo EFFIS. Pero lo que más quema no es solo el fuego: es el silencio. Silencio político, mediático e institucional. Silencio que encubre negligencias, presupuestos insuficientes y decisiones forestales que alimentan el desastre.

Los incendios no son solo meteorología. Son planificación fallida, especies inflamables autorizadas por decreto, cortafuegos mal diseñados o inexistentes. Son el abandono rural, la falta de pastoreo y desbroce de biomasa que convierte el monte en una bomba que incinera paisaje, biodiversidad y aire. Son también la ausencia de criterios urbanísticos aplicados al suelo forestal. ¿Por qué no se exige a las plantaciones forestales lo que sí se exige al urbanismo? ¿Por qué no se zonifica, regula y previene desde el diseño?

En Galicia, más de 156.000 hectáreas han ardido, de las cuales el 98,6% se concentran en Ourense, con un solo incendio en A Rúa que ha calcinado 44.789 hectáreas. En Castilla y León, el presupuesto para prevención y extinción en 2025 es de 42,3 millones de euros, según la Ley de Presupuestos Generales. ¿Es suficiente? ¿Dónde está el desglose por provincia, por tipo de actuación, por brigada? ¿Por qué no se publica con transparencia? ¿Dónde están las hectáreas de monte, caminos y sendas desbrozadas desde 1981?

Los medios generalistas no informan. Las revistas especializadas callan. La clase política mira hacia otro lado. Pero la Fiscalía de Medio Ambiente ha anunciado una investigación. Desde CyN, lo hemos solicitado y lo seguiremos haciendo a múltiples niveles. Llevamos más de una década reclamando una agenda pública de brigadas y distritos forestales. Desde el pasado 3 de julio, nos hemos volcado en el análisis de causas, origen y superficie comparativa quemada en la UE, con especial atención a Francia, España y Galicia.

Comparativa internacional (2025)

Fuentes: EFFIS, Copernicus, MITECO, IGN, ADEME (Francia)

Francia, con incendios graves en Corbières (16.000 ha), ha activado el Mecanismo Europeo de Protección Civil y publicado mapas de riesgo y presupuestos por región1. España, en cambio, carece de desglose provincial público y de criterios técnicos homogéneos para cortafuegos, que deberían alcanzar 100, 300 o 500 metros según orografía y tipo de plantación.

La prevención comienza en el tipo de árbol autorizado, en el diseño del paisaje forestal, en aplicar al monte los criterios que rigen el suelo urbano. En escuchar a científicos, no solo a lobbies forestales. En invertir en brigadas, formación y vigilancia, no solo en helicópteros cuando ya es tarde.

Este comentario editorial se publica con cuatro infografías limpias, visuales y en color, diseñadas para móviles, que oxigenan al lector con información que no encontrará en ningún otro medio. Porque la lealtad con la tierra quemada exige coherencia, rigor, voz propia y diferenciada, labrada con plan, trabajo y pasión.

Comentarios Comentarios desactivados en Incendios forestales 2025: el silencio que quema

España acumula en 2025 un mínimo de 391.581 hectáreas calcinadas(Copernicus), de las cuales unas 350.000 ha ardieron solo en agosto. Son cifras que ya superan las de 2022 y convierten este año en el más devastador del siglo XXI. El sistema europeo EFFIS contabiliza 230 focos ≥30 ha, pero miles de incendios menores permanecen ocultos en los partes oficiales.

El balance humano es demoledor: 33.750 evacuados, 4 fallecidos, decenas de heridos, casas reducidas a cenizas y pueblos enteros desalojados en Galicia, Castilla y León y Extremadura.

Lo que arde detrás del fuego

No se trata solo de calor o sequía. Los incendios responden a causas clínicas forestales que explican su virulencia y extensión:

  • Monocultivo inflamable de eucalipto y pino, con aceites volátiles y continuidad del combustible.
  • Ausencia de mosaicos agroforestales y de franjas de frondosas nativas que frenen la propagación.
  • Falta de labores de prevención en el territorio, entornos de núcleos y cuencas de ríos.
  • Cortafuegos ineficaces (<40 m) frente a incendios que saltan con viento distancias de 200–500 m.
  • Pastos abandonados, que acumulan matorral seco sin aprovechamiento ganadero.
  • Cambio climático, que multiplica ignición y severidad.

El resultado son incendios de sexta generación, con llamas de más de 30 m, velocidades de propagación superiores a 6 km/h y columnas convectivas capaces de generar tormentas de fuego.

Una semilla para más incendios

Lejos de corregir este modelo, Galicia afronta la amenaza del proyecto Altri–Greenfiber en Palas de Rei, que podría consumir entre 1 y 2,4 millones de toneladas de eucalipto al año.

Expertos, ecologistas y sociedad civil —incluida CyN— advertimos que esta industria incentivaría la expansión del monocultivo, justo el modelo que agrava los incendios forestales.

La sociedad civil exige ampliar la moratoria de nuevas plantaciones de eucalipto hasta 2030, también en Asturias, Cantabria, Euskadi y Bizkaia, y prohibir su presencia en espacios protegidos.

Presupuestos y registros inveraces

Galicia presupuestó entre 30,5 y 41 millones €/año (2020–2024) para prevención y extinción, pero sin indicadores verificables de ejecución: ni km de fajas, ni ha tratadas, ni puntos de agua, ni brigadas permanentes por distrito.

A ello se suma una práctica gravísima: registros oficiales de hectáreas desbrozadas que no existen en el territorio real. Documentos públicos reflejan actuaciones inexistentes, alimentando sospechas de desvío de fondos y falsedad documental, tipificada en el Código Penal.

Ninguna CCAA publica datos diarios sobre incendios y conatos <20 ha. El Estado solo interviene en Nivel 3, pero ninguna comunidad lo declaró en 2025 para evitar la fiscalización estatal y europea. Prefirieron solicitar medios de la UME, Defensa y fondos europeos, pero sin abrir en canal las carencias acumuladas en prevención.

Lo que exige la sociedad civil

1. Datos diarios, completos y públicos por CCAA, incluyendo incendios <20 ha.
2. Partes mensuales de prevención real: km de fajas, ha desbrozadas, puntos de agua, brigadas disponibles.
3. Planes obligatorios de mosaicos agroforestales con frondosas autóctonas y franjas agrícolas.
4. Control riguroso del gasto público, con auditorías independientes, sanciones y participación vecinal.
5. Brigadas y bomberos forestales permanentes y formados, coordinados con la población rural.

Justicia, Europa y fiscalización internacional

La magnitud de 2025 —cientos de miles de hectáreas arrasadas, pueblos desalojados, víctimas, espacios protegidos en llamas y registros administrativos falsos— exige que la Fiscalía de Medio Ambiente, las Audiencias Provinciales y los órganos de control de la UE investiguen posibles delitos de ecocidio, malversación, falsedad documental y desviación de fondos europeos.

No se trata solo de apagar incendios, sino de destapar décadas de inacción preventiva y simulación administrativa.

Conclusión

El fuego ha desenmascarado un modelo forestal condenado a arder: monocultivos inflamables, prevención simulada y presupuestos sin control.

La prevención real empieza en qué se planta y dónde se planta, en mosaicos, pastos, cortafuegos naturales y gestión vecinal del monte.

Sin ello, cada verano será un teatro de humo, sirenas y propaganda política, mientras el territorio y la vida rural desaparecen.

✍️ CyN alerta: La opacidad de los portales de transparencia y los registros inveraces de hectáreas desbrozadas constituyen falsedades documentales que deben investigarse (km de fajas, ha tratadas, puntos de agua operativos, brigadas permanentes por distrito). Ninguna CCAA publica un portal diario de incendios y conatos <20 ha, lo que distorsiona la percepción del riesgo.
El Estado solo interviene en Nivel 3, sin control sobre el uso de fondos europeos y nacionales transferidos. La consecuencia: presupuestos que se gastan, pero montes que no se cuidan, sin plan ni acción preventiva integrada.

Fuentes verificadas (20/08/2025): Copernicus/EFFIS, MITECO, Praza.gal, InfoLibre, USC–CSIC (2025), Greenpeace, Ecologistas en Acción, GaliciaPress, Biofuelwatch, Montescola y C.P.

Comentarios Comentarios desactivados en Los incendios en España desnudan el abandono institucional y un modelo forestal incendiario

I. ¿Quién incendia España? ¿Y Galicia?

Cada verano, la maquinaria institucional y mediática activa su ritual: buscar un culpable, hablar de detenciones, detener a un presunto autor, publicar una imagen.

Pero ¿cuántos son en realidad? ¿cuántos pagan por ello? ¿cuántas condenas hay frente al número real de incendios?

Y lo más importante: ¿cuánto se ha hecho por prevenirlos?

Este análisis, sustentado en datos oficiales de 2013 a 2024, desarma la gran falacia incendiaria: la de quienes se lavan las manos como Pilatos, atribuyendo las causas a unos pocos “malos” y ocultando la falta de prevención estructural, el abandono de cortafuegos, el caos de especies foráneas y la ausencia de planificación.

II. Superficie quemada: Galicia desproporcionadamente afectada

📊 Entre 2013 y 2024 se registraron:

Período

Nº Incendios en España

Superficie quemada en España (ha)

Superficie quemada en Galicia (ha)

2013–2024

124.107

1.201.400

89.000

🔎 Galicia supone apenas el 5,85% de la superficie de España, pero concentra el 7,4% de la superficie quemada.

Un porcentaje desproporcionado, que revela una gestión forestal fallida.

III. ¿Dónde están los incendiarios?: Detenidos y condenados

En el mismo período, los datos de detenciones y condenas desmontan el mito de que los incendios responden a una red masiva de criminales:

Indicador

Valor (España)

  • Detenidos 2013–2024

789

  • Media anual detenidos

66

  • Media anual condenados

24

  • Condenados en 2016

140

  • Condenados en 2022

99

  • Total condenados (2013–2022)

239

  • Años sin constancia de condenados

10 de 12

👉 Las condenas son excepcionales, no la norma, y los datos disponibles son escasos, opacos o inexistentes en muchos años.

IV. Causas reales silenciadas

Las tres causas estructurales de fondo, reiteradas en informes e infografías de CyN, son:

  1. Falta de cortafuegos naturales anchos (de 100 a 300 metros), sustituidos por franjas simbólicas que no detienen ningún fuego.

  2. Plantación masiva de especies foráneas (eucaliptos, pinos) sin regulación estratégica, ni limitación de cargas combustibles.

  3. Ausencia de brigadas de prevención activa durante buena parte del año y contratación estacional precaria con fines clientelares.

🧯 Ninguna de ellas depende de un “incendiario”: dependen de las Administraciones Públicas responsables.

V. Conclusión

Se incendia lo que no se cuida, no lo que se vigila.

La falta de prevención no es un fallo: es una política.

Y la criminalización sistemática sin base probatoria ni resolución de condena es una coartada que auto pretende eximir a quienes tienen el deber constitucional de proteger el territorio, la masa forestal, el paisaje, las propiedades, las vidas y la biodiversidad y no lo hacen, con el silencio cómplice de los parlamentos y otros órganos de la U.E., del Estado y de la Comunidad Autónoma de Galicia.

 VI ¿Quién decide lo que se planta y lo que se quema?

No basta pues con mirar las llamas y solicitar la intervención de la UME cuando el fuego arrasa con todo y está fuera de control días y semanas, año tras año.

Hay que mirar quién tiene las competencias legales —y las responsabilidades morales— en materia de:

  • Ordenación del territorio y del monte

  • Planificación de especies y usos forestales

  • Prevención de incendios forestales

  • Gestión del riesgo y de la biodiversidad

  • Extinción y cuidado del paisaje rural

La respuesta está clara:

Las tienen las Administraciones Públicas, no los incendiarios.

Quien decide lo que se planta, dónde y cómo, lo hace sobre la base de políticas, leyes, presupuestos y prioridades.

Y también quien decide no prevenir, tener recursos ociosos e infrautilizados, no limpiar, no planificar, está tomando decisiones, aunque las oculte tras discursos alarmistas o frases rituales, falacias que confirman la incapacidad y la cobardía para afrontar un problema muy serio.

Lo que arde hoy no es sólo vegetación seca:

es el resultado de un modelo forestal fallido, urbanocéntrico, desconectado del rural y sin planificación real.

Un modelo que repite errores durante décadas, mientras el monte se convierte en combustible y los pueblos en ceniza.

Ninguna persona decente puede seguir diciendo que esto es culpa de un “pirómano suelto” o de un “verano atípico”.

Porque el fuego no se improvisa: El fuego es la consecuencia de una ausencia continuada de cuidados.

Y si las competencias están claras… que las ejerzan o que dimitan.

Pero que no se escondan tras titulares ni estadísticas sesgadas.

Desde CyN, con datos verificados, decimos basta.

👉 Exigimos un plan forestal preventivo, cortafuegos reales, especies compatibles con el territorio y presencia de brigadas todo el año.

👉 Exigimos dejar de mentir: los datos, las condenas y la superficie quemada hablan más claro que cualquier nota de prensa.

📚 Fuentes documentales:

  • EGIF (MITECO), PLADIGA (Xunta de Galicia), Fiscalía General del Estado, CENDOJ, EFFIS–Copernicus, informes CyN y medios oficiales.

Comentarios Comentarios desactivados en LA GRAN COARTADA INCENDIARIA: CULPAR SIN PREVENIR

Personajes:

  • Comisaria de Medio Ambiente de la UE, elegante, acento extranjero.

  • Diputado Estatal, traje impecable, manos limpias de tierra.

  • Diputado Autonómico, corbata torcida, botas relucientes.

  • Conselleira de Medio Rural, sonrisa oficial de protocolo.

  • Conselleira de Medio Ambiente, cargada de estadísticas y excusas.

  • Director de Montes, casco blanco, papeles llenos de sellos.

  • El Bosque de Galicia, ennegrecido, cubierto de ceniza.

  • La Abeja Europea, mensajera del aire, zumbido indignado.

  • El Río Donsal, viejo y sabio, arrastra cenizas de su propia cuenca.

  • Coro de Vecinos del Monte, tosiendo y expectantes.

[Escena: Salón de plenos improvisado en un claro humeante. Troncos calcinados como bancos, ceniza cayendo como nieve gris. Tres banderas caídas: UE, España, Galicia.]

  • BOSQUE DE GALICIA (con voz profunda y dolida):— Este es mi parlamento. Hablad, políticos, que yo escucho. Ardo desde 1950 en silencio, volví a arder en 2006, en 2017 y en julio de 2025 España entera lleva 21.000 hectáreas a ceniza.

  • COMISARIA UE (mirando en su tablet):— Desde Bruselas enviamos millones para prevención, cortafuegos y brigadas. Pero aquí solo veo humo… y fotos de helicópteros.

  • DIPUTADO ESTATAL (se abanica con una nota de prensa):— España cumple… más o menos. Este es un “problema estacional”.

  • DIPUTADO AUTONÓMICO (sacudiéndose ceniza):— ¡Mentira! Tenemos PLADIGA, 19 distritos forestales, brigadas fijas y temporales, y helicópteros alquilados.

  • CONSELLEIRA DE MEDIO RURAL (sonrisa de despacho):— Hemos hecho un gran esfuerzo… Los incendios son imprevisibles.

  • CONSELLEIRA DE MEDIO AMBIENTE (mostrando una estadística):— Si miramos solo julio, la superficie quemada es menor que la de 2017.

  • DIRECTOR DE MONTES (leyendo nervioso):— Tenemos 1.200 km de cortafuegos… algunos sin limpiar. Y seguimos plantando…

[Entra la ABEJA EUROPEA, zumbando con rabia sobre los papeles.]

  • ABEJA:— ¡Mentira voladora!

  • La biodiversidad muere.

  • Las colmenas arden.

  • Las truchas del Donsal respiran ceniza.

  • Vuestros informes se convierten en humo sobre mis alas.

  • RÍO DONSAL (con voz grave):— He visto vacas correr, vecinos confinados, 20.000 personas encerradas mientras ardían mis laderas.

  • CORO DE VECINOS (tosiendo):— Queremos prevención, no promesas.— Queremos urbanismo forestal, no fotos con hidroaviones.— Queremos vida, no ceniza cada verano.

  • BOSQUE DE GALICIA (con rabia final):— Setenta años plantando sin plan de especies,cien años de ceniza si no cambiáis.

  • COMISARIA UE (mirando al público):— Europa no paga humo. Europa exige responsabilidad.

  • ABEJA EUROPEA (sobrevolando la escena):— Sin cortafuegos reales, sin control del monte, sin planificación honesta, la próxima lista de muertos y hectáreas llevará vuestra firma.

[Silencio. La ceniza cae. Todos miran al público buscando absolución.]

  • CORO FINAL (todos los personajes):— Julio 2025:

  • 21.000 hectáreas quemadas.

  • 20.000 personas confinadas.

  • Bosques negros, aire muerto, biodiversidad perdida. Solo la prevención real y la verdad podrán salvarnos.

[Oscuro. Zumbido de abeja y rumor del Donsal como eco.]

______________________________________________________________

Fuentes teatrales y de datos: EFFIS / Copernicus EU JRC, MITECO, PLADIGA (Xunta de Galicia), INE, IGE, estudios académicos sobre gestión forestal en Europa.

Comentarios Comentarios desactivados en EL PARLAMENTO DEL HUMO (Obra comprimida de denuncia teatral sobre incendios y abandono forestal en Galicia y España)

“La transparencia del presupuesto no es solo una exigencia técnica, sino una condición esencial de la democracia. Allí donde hay oscuridad contable, hay déficit político.”


Juan Velarde Fuertes (1927–2023), catedrático de Hacienda Pública

Galicia arde en silencio entre partidas opacas, notas de prensa sin ejecución acreditada y presupuestos que simulan más de lo que previenen. En 2025, como ya sucedió en 2024, la Xunta de Galicia reincide en una práctica institucional que aparenta simulación presupuestaria, vulnerando los principios de transparencia, claridad y rendición de cuentas establecidos en la Ley 19/2013, de Transparencia, y en la normativa presupuestaria de la Unión Europea.

Frente al liderazgo trágico de Galicia en materia de incendios forestales —por superficie quemada, gasto por hectárea, daño ecológico y número de víctimas de incendios forestales: 49 en España y Portugal en 2017, 4 de ellos en Galicia—, no existe información consolidada ni trazable sobre el destino real de los fondos públicos anunciados para prevención y extinción. Los 224 millones de euros publicitados no cuentan con respaldo documental verificable. Lo que hay es dispersión contable, opacidad estructural y una preocupante falta de trazabilidad operativa y territorial.

La investigación comparada realizada por la Asociación Castaño y Nogal (CyN), con base en fuentes oficiales de la UE, Francia, España y Galicia, confirma esta simulación prolongada que convierte la política forestal en un dispositivo reactivo, post mortem, alejado de cualquier planificación integrada o urbanismo de prevención.

Las infografías que acompañan este comentario editorial ofrecen al lector un análisis y diagnóstico visual contrastado del problema de fondo de la prevención y de la forma en que Galicia afronta la lucha contra los incendios forestales, que culmina con una infografía que refuerza -una vez más- el mensaje de que la misma comienza con selección de especies y prevención real y ordenada los 365 días del año.

Como en la medicina, el medio ambiente gallego necesita análisis rigurosos, escáneres, diagnósticos certeros y cirugía real. No se puede seguir aplicando sueros diluidos cuando el bosque sangra por dentro. La prevención exige precisión, alma y voluntad política. Sin eso, todo vuelve a arder.

Comentarios Comentarios desactivados en OPACIDAD PRESUPUESTARIA Y PREVENCIÓN DE INCENDIOS EN GALICIA (2025)

  • © Asociación Castaño y Nogal – Todos los derechos reservados. Queda prohibida la reproducción, distribución o publicación total o parcial de cualquier contenido sin autorización expresa y por escrito. Este aviso afecta a: textos, imágenes, infografías, ilustraciones, informes, poesías, traducciones, encabezamientos, títulos, estructuras y diseños propios.